El Chacra Verde, conocido también como Chacra Cardiaco, Centro del Amor Vivo y Anahata
Ubicación
En el centro del pecho.
Partes del Cuerpo
Este chacra se encuentra asociado con el corazón y el sistema circulatorio, así como con el plexo cardiaco, los pulmones y todo el área pectoral. La glándula endocrina que se encuentra relacionada con este chacra es el timo, que controla el sistema inmunológico.
Sentido
El sentido físico asociado con el Chacra Verde es el tacto. Este sentido (el tacto) puede estar relacionado con el Chacra Naranja en cuanto a su aspecto de sensación, pero en este caso su relación con el tacto se refiere a la manera en la que una persona siente cuando se la toca, y a lo que experimenta su alma al ser tocada.
Cuando alguien es demasiado sensible al hecho de ser tocado, consideramos que esto tiene que ver con algo que está ocurriendo en su Chacra Verde. De manera semejante, las personas que suelen tocar a los demás cuando están hablando, implican su Chacra Verde al relacionarse. Quienes experimentan insensibilidad en una parte de su cuerpo en particular, o cierto adormecimiento, son personas que quieren evitar sentir; esto también está asociado con bloqueos en el Chacra Naranja, en cuanto a que regula su disposición a sentir emociones.
Cuando una persona recibe un masaje, éste puede consistir solamente en una experiencia física, o bien puede ser que el masajista transmita cierta sensibilidad al alma de la persona que recibe el masaje, sintiendo él a su vez lo que experimenta esa persona. De ese modo, el masajista podría modificar sus técnicas basándose en la relación que establece con el alma de la persona que recibe el masaje, en lo que le llega de ella. Cuando se experimenta esta relación podemos decir que es el sentido del tacto que se asocia con el Chacra Cardiaco el que está activado.
Consciencia
Todos los chacras que hemos visto participan de alguna forma en las experiencias del individuo respecto a él mismo; sin embargo, a partir del Chacra Verde veremos cómo esas experiencias se relacionan con el entorno. La palabra clave es “relación“.
El Chacra Verde se asocia con la relación, con el área de las relaciones que establece una persona en su vida, y con sus percepciones del amor. Puede ser una relación de compañeros o un vínculo con alguna persona afectivamente cercana, como su pareja, los padres, los hijos o hermanos. Cuando esa relación tiene que ver con el amor, puede percibirse como un proceso de dar y recibir amor. O bien puede ser experimentada como el hecho de encontrarse en un espacio compartido en el que el amor se vive y fluye, donde hay un sentido de “inclusión“, no necesariamente sólo como dar y recibir.
Elemento
El elemento que se asocia con este chacra es el aire. Podemos afirmar que la relación de una persona con el aire reflejará sus relaciones con el amor. En las personas que tienen algún problema con el aire, es decir, con la respiración, como puede ser asma o enfisema, su “incapacidad” para inspirar o espirar refleja sus decisiones relacionadas con aceptar o rechazar el amor.
Tensiones en el Chacra Verde
Como la glándula timo, que controla el sistema inmunológico, está relacionada con este chacra, quienes padecen alguna afección en dicho sistema (sida, VIH positivo) tienen conductas que afectan a su percepción del amor. Su estilo de vida los separa de la gente a la que aman. Es posible que los detalles en los estilos de vida de esas personas sean diferentes: desde tener preferencias sexuales distintas hasta utilizar drogas no aceptadas por la sociedad.
Obviamente, los problemas cardiacos, circulatorios o de cualquier tipo que afecten a todo el sistema circulatorio tienen su origen en el Chacra Verde y en las percepciones de la persona sobre el amor y cómo éste fluye.
Cáncer de mama
Otros síntomas que reflejan tensiones en el Chacra Verde son los que aparecen en el pecho o la espalda, a la altura de este chacra. Algunos ejemplos de ello son el cáncer de mama u otros tumores, y también los problemas de piel que se presentan en el área del Chacra Verde.
El cáncer es una metáfora de lo que se reprime y no se expresa; la zona afectada muestra aquello que se reprimió y nunca se exteriorizó. Cuando se afectan los senos de una mujer, se podría afirmar que ello representa algo relacionado con sus sentimientos respecto a ser mujer y a ser madre. Si seguimos la posible conclusión lógica de la enfermedad, nos encontraremos con la posibilidad de que el seno tenga que extirparse.
Describiendo el problema desde el punto de vista de que la misma mujer lo creó, podríamos decir que ella ha estado mutilando su feminidad y manifestando más características masculinas de las que tendría en su estado natural. La razón de su endurecimiento es muy clara. Necesita sacar algo de su pecho, algún resentimiento que ha sido contenido en el área del Chacra Verde, el área asociada con las relaciones; se siente mal por algo sucedido en el pasado y decide que ya no quiere vivir en esa situación.
Si el síntoma se encuentra en el lado emocional o sentimental del Chacra Verde, es posible afirmar que existe un conflicto que involucra emociones dentro de una relación; y si está en el lado de la voluntad, entonces se tratará de un conflicto que atañe a la voluntad o a lo que la persona desea. Igualmente sería posible considerar dicho síntoma desde el punto de vista de los lados masculino y femenino del cuerpo, y preguntarnos si podría tener sentido considerarlo como un conflicto con un hombre o una mujer.
Los mismos síntomas pueden afectar a un hombre, aunque es menos común. Cuando así sucede, el significado es el mismo con respecto al equilibrio del individuo entre esas características que definimos como masculinas o femeninas.
Abrir el Chacra Verde
Cuando el Chacra Verde necesita abrirse más, puede tratarse simplemente de un problema de evolución, en el cual la persona debe tomar la decisión de experimentar más amor del que las definiciones de amor tradicionalmente aceptadas han permitido, o bien tal vez deba decidir cambiar la sede de su consciencia hacia el Chacra Verde.
También podría tratarse de una obligación impuesta por la necesidad de curarse a sí mismo de algún síntoma que está relacionado claramente con las percepciones del amor o con la falta de éste, sobre todo si permitió interferir a sus resentimientos, juicios y expectativas en la percepción del amor. Cualquiera que sea la razón que podamos tener para cerrarle la puerta al amor o para no sentirlo, no es razón suficiente.
En lo que respecta a la relación que el Chacra Verde guarda con el sistema inmunológico, debemos reconocer la importancia que tiene el amor en nuestras vidas. Es necesario para nuestra supervivencia; sin él la persona preferiría no vivir.
Aceptación y autoaceptación
Cuando el Chacra Cardiaco, es decir, el Chacra Verde, se ha cerrado, podemos utilizar la Aceptación como llave o como punto de referencia para abrir el proceso. La palabra puede tener diversos significados dependiendo cómo se vea a través del filtro personal de percepciones, o sea, de la burbuja de cada individuo. Por consiguiente, puede estar relacionada con las percepciones individuales que deberían cambiar para que la persona experimente más amor.
La curación comienza con la aceptación emocional de que hay algo que debe ser curado. En caso contrario, habrá tanta negación que la resistencia al problema captará la atención y la energía que deben ser dirigidas hacia la curación.
La aceptación de que algo necesita curarse permite que se dé el acto de amor hacia uno mismo de desear que la curación ocurra.
La aceptación permite admitir el estado de consciencia en el cual el síntoma se libera. También es posible emplearla como recordatorio de que la persona debe aceptar el amor que le rodea para que su poder curativo surta efecto.
La apertura del Chacra Verde puede ser un proceso de autoaceptación, en el que los juicios sobre sí mismo se remplazan por amor propio. Más que buscar razones para creer que debes cambiar tu forma natural de ser y aquello que es verdad para ti, la idea es que te des cuenta de lo importante que es tu individualidad y tu unicidad. De ese modo podrás admitir que tu forma de ser es natural para ti, sin tener que emitir juicios sobre ella; y así, verás como los demás terminarán apreciándola.
Puedes optar también por pasar más tiempo con quienes te aprecian y te aman. Junto a esa aceptación vendrá otra aceptación de la individualidad de los demás y una sensación de aprecio. Puesto que también tú aceptarás a los demás por ellos mismos, y sus actitudes no serán objeto de juicio, la apreciación podrá crecer en tu interior y al hacerlo te sentirás mucho mejor.
Cuando no existen expectativas no habrás que esperar que los demás cambien algún aspecto de su forma de ser, que para ellos es natural; les podrás ver como lo que son en el momento de la experiencia. Eliminar los juicios y expectativas de tus percepciones dejará gratas emociones en tu corazón, y eso es lo que se llama aceptación, y también se conoce como amor.
Cuando ves el mundo desde el Chacra Verde
Cuando las percepciones se te presentan al nivel del Chacra Verde, parece que el mundo entero funciona a partir de ese punto; como si las acciones de todas las personas tuvieran al amor como fuerza motivadora, como si todo el mundo se sintiera motivado por el amor.
Una persona puede expresar su amor diciendo a otros lo que tienen que hacer; si eso sucede la persona que recibió el consejo entenderá que se trató de una expresión de amor. Sin embargo, también puede entenderse de otra forma, ya que la persona que recibió la sugerencia podría sentir que si alguien realmente la amara no trataría de controlar su vida, sino más bien reconocería su capacidad para tomar decisiones y desarrollarse por sí misma.
Padres e hijos
Pongamos un ejemplo. Los padres suelen expresar su amor actuando como padres, pero los hijos se convierten en adultos y es posible que ya no quieran que se les trate como los padres tratan a los hijos. Si los hijos (ya mayores) rechazan la expresión de amor de sus padres, éstos lo intentarán de nuevo y quizás tengan la impresión de que sus hijos ya no les aman. El hijo dice: “Si mis padres en verdad me amaran, no me dirían lo que tengo que hacer. Me dicen lo que debo hacer porque no me aceptan como soy”. El padre, a su vez, dice: “Mis hijos no me escuchan; ya no me quieren”.
Es importante mirar más allá de la expresión de amor y sentir lo que hay detrás de ella, a fin de que su percepción permanezca. Por ejemplo, el adulto (en otro tiempo niño) puede decirle a sus padres: “Gracias por querer ayudarme, pero quiero hacerlo por mi mismo; se que me amáis y que lo que deseáis es que yo sea feliz. Hacerlo a mi manera me hará feliz. Gracias por vuestro cariño. Yo también os quiero”.
Con la certeza de que hay amor, las tensiones que acompañan las percepciones erróneas acerca de su ausencia se liberan. Sin estas tensiones y sin los síntomas que las había acompañado, la persona será capaz de percibir nuevamente el mundo que la rodea de la manera que mejor le funcione y que le permite curarse y ser feliz.
El amor cura.
Martin Brofman
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