Dar y recibir
El universo opera por medio de un intercambio dinámico… Dar y recibir son aspectos diferentes del flujo de la energía en el universo. Y si estamos dispuestos a dar aquello que buscamos, mantendremos la abundancia del universo circulando en nuestra vida.
Toda relación es una relación de dar y recibir. El dar engendra el recibir, y el recibir engendra el dar. Lo que sube debe bajar; lo que se va debe volver. En realidad, recibir es lo mismo que dar, porque dar y recibir son aspectos diferentes del flujo de la energía en el universo. Y si detenemos el flujo de alguno de los dos, obstaculizamos la inteligencia de la naturaleza.
El dinero realmente es un símbolo de la energía vital que intercambiamos, y de la energía vital que utilizamos como consecuencia del servicio que le prestamos al universo.
Cuanto más demos más recibiremos, porque mantendremos la abundancia del universo circulando en nuestra vida. En realidad, todo lo que tiene valor en la vida se multiplica únicamente cuando es dado. Lo que no se multiplica a través del dar, ni vale la pena darse, ni vale la pena recibirse. Si al dar sentimos que hemos perdido algo, el regalo no ha sido dado en realidad, y entonces no generará abundancia. Cuando damos a regañadientes, no hay energía detrás de nuestro acto de dar.
En realidad, practicar la ley del dar es muy sencillo: si deseamos alegría, démosles alegría a otros; si deseamos amor, aprendamos a dar amor. ¿Buscamos atención y aprecio? Aprendamos a prestar atención y a apreciar a los demás. Si deseamos riqueza material, ayudemos a otros a conseguir esa riqueza.
Cómo generar abundancia a mi alrededor
Pondré a funcionar la ley del dar comprometiéndome a hacer lo siguiente:
1) Llevaré un regalo a cualquier lugar a donde vaya y para cualquier persona con quien me encuentre. Ese regalo puede ser un elogio, una flor o una oración. Hoy les daré algo a todas las personas con quienes me encuentre, para iniciar así el proceso de poner en circulación la alegría, la riqueza y la prosperidad en mi vida y en la de los demás.
2) Hoy recibiré con gratitud todos los regalos que la vida me dé. Recibiré los obsequios de la naturaleza: la luz del sol y el canto de los pájaros, o los aguaceros de primavera o las primeras nevadas del invierno. También estaré abierto a recibir de los demás, sea un regalo material, dinero, un elogio o una oración.
3) Me comprometeré a mantener en circulación la abundancia dando y recibiendo los dones más preciados de la vida: cariño, afecto, aprecio y amor. Cada vez que me encuentre con alguien, le desearé en silencio felicidad, alegría y bienestar.
Podemos ayudarte
No te diremos lo que tienes que hacer. No presionamos, ni aconsejamos, ni recomendamos. Exploraremos juntos, haremos preguntas, te ofreceremos interpretaciones que tal vez puedan sorprenderte. Desafíaremos respetuosamente tus modelos mentales para que desarrolles una nueva mirada que te permita descubrir nuevas acciones y posibilidades. Y te acompañaremos en el diseño de acciones que te faciliten el logro de los resultados que tanto buscas y tanto te mereces.