Brilla. Déjate ser. Regálate a los demás
Estás hecho para brillar.
¿Lo has pensado alguna vez?
Brillar es, al fin y al cabo, permitirte ser, porque ese brillo que crees que no tienes está en ti. Pero ay, cuántas capas de miedo, dudas, desconocimiento e inseguridad hemos puesto encima de ese brillo… tantas que apenas se ve.
Pero está.
Cuando tú brillas, ofreces al mundo gran parte de lo que puedes darle; compartes, aportas a los demás.
Cuando tú brillas, permites que los demás también lo hagan. Por eso, brilla.
Regálate a los demás.
Ilusiónate con el reto.
Lucha por lo que quieres.
Ábrete al mundo, te está esperando.
Quédate con esa mirada. La que es capaz de ver en ti lo que tú no sabes que eres. Y así poder acercarte a lo que puedes llegar a ser
¿Qué mirada? La tuya. Porque hoy puedes elegir mirarte de otra forma.
Una mirada apreciativa, una mirada sin juicios, y con mucho que agradecer(te).
Una mirada que va más allá de enfocarte en lo que te falta, en lo que no haces bien, en lo que te queda por conseguir, para mirar lo que eres, lo que ya has conseguido, lo que has logrado superar. Cuando te miras así, te haces fuerte, y fuerte puedes con todo.
Quédate con esa mirada: la mirada de «creo en mí», «confío en mí» y de «yo puedo», que te dará la fuerza y determinación que necesitas para conseguirlo.
Laura Chica