Me perdono
Hoy me he sentado a tomar un café conmigo mismo y de nuevo me descubrí alzándome la ceja.
Entonces me dije que ya basta de ser tan duro.
A veces debería probar, simplemente, perdonarme…
Me perdono por dejarme en último lugar infinidad de veces.
Por hacerme pedazos para completar a otros.
Por no tener tiempo para mí.
Me perdono por no hacerme caso y tropezar con el mismo obstáculo una y miles de veces.
Por poner mi salud como algo pendiente y no como una prioridad.
… Por haber hablado de más…
Y también por haberme callado.
Me perdono por confundir resignación con tolerancia.
Por no gastar en mí lo que sin reparo gasto en alguien que a veces no lo merece…
Por mentirme…
… Por no detenerme para mirarme en el espejo más a menudo.,,
Y por no ser más amable conmigo mismo.
Me perdono por no tenerme paciencia ni tener constancia.
Por ser tan exigente cuando se trata de mí.
Me perdono no encajar en un molde.
Por no permitirme muchas cosas.
Y por no disfrutar de otras tantas.
Me perdono por no valorar los momentos que valen la pena y darme cuenta muy tarde…
Entonces me hablé a mi mismo…
Debo aprender a soltar, a dejar ir, a perdonar, me dije… El mundo no está en mi contra, simplemente es el mundo… y la gente es gente, con lo bueno y con lo malo. A veces simplemente estamos parados en el camino equivocado con alguien que viene a todo pulmón y nos arrasa sin miramientos.
No hay explicaciones ni justificaciones, es así… sucede.
¿Sabes?, me dije, necesito tu cariño, tu abrazo, tu complicidad.
Te hago un trato…..
Te propongo…..
Menos reproches y más amor.
Menos revivir el momento y más perdón, sin echarme en cara después mis errores, sin pensar en un problema toda la noche, sin sentir una punzada con un recuerdo cruzándome la mente.
¿Y si me perdono?
Sí, me perdono; me acepto, hago las paces conmigo mismo y hago limpieza general en mi memoria y en mi corazón…
Decidido!
Publicado por Pepi en el grupo de WhatsApp del Retiro Septiembre 2021